Testimonio

Debo reconocer mis carencias creativas.
Me falta el valor del poeta maldito,
Y carezco de la gracia y agudeza de la
Escritora observadora de la vida.

La falta de métrica en mis escritos
Junto a la ausencia de llamados
A la lucha revolucionaria.

La inexistencia total de metáforas eróticas
Buscando llevar al lecho a alguna lectora incauta.
Y más aún, sin trazas siquiera de
Profundas reflexiones filosóficas,
Dejan en una pobreza franciscana
Casi todo lo que escribo.

Pero no podrán negar,
Si hay algo hermoso, auténtico o bello en mis letras,
fue tu presencia quien las creó.

Cada recuerdo
Cada instante
Cada una de tus sonrisas
El fulgor de tus sueños y ocurrencias
La vida en cada rincón de tu cuerpo
Fueron volcados en las palabras que escribía
Al alero de la soledad
Llorando tu ausencia
Sostenido en la esperanza de tu regreso...

Y mis escritos fueron para ti

Si hubo belleza era la de tu sonrisa
Si hubo ingenio era para lograr tu asombro y admiración
(un motivo para que te quedaras conmigo)

Tú has sido el motivo de escribir
Aún antes de encontrarnos.

¿Y ahora?
Escribir a la felicidad de estar juntos no puedo
Carezco de las palabras capaces de describir
Lo que me supera y desborda el alma y mi corazón.

Queda el presente testimonio
Testimonio de mi amor
En palabras escritas
El intento de regalarte algo parecido
A lo que me has dado...la absoluta belleza
de amar.